Todos tenemos un potencial ilimitado.

Todos tenemos un potencial ilimitado.

A través del dominio de uno mismo, podemos tomar el control de nuestras vidas, dominar las fuerzas que modelan nuestro destino, y conseguir aquello que queramos en la vida. Todos nacemos con determinados talentos y oportunidades, y en el fondo, todos deseamos marcar la diferencia. Pero la mayoría de las veces nos falta enfoque y confianza para conseguirlo. DEBES ELEVAR TUS ESTÁNDARES Todo comienza con una decisión: toda decisión (o la falta de decisión) tiene consecuencias. Si no decides ahora cómo vas a vivir dentro de 10 años, habrás, por defecto, decidido cuáles quieres que sean las circunstancias que dictan tu vida. Toda persona de éxito ha tomado una decisión importante en su vida (Ghandhi, JFK...). Tus decisiones están ligadas a tus compromisos, a tus acciones, a tu aprendizaje y a tu flexibilidad. PLACER Y DOLOR Son las fuerzas que nos dirigen. Todo lo que hacemos es para evitar el dolor o para conseguir placer. Hasta aquello que sabemos que es bueno para nosotros en el largo plazo puede que no lo hagamos porque nos produce dolor en el corto plazo. La clave está en aprender a utilizar el dolor y el placer para gestionar nuestras decisiones y acciones, no para que nos controlen. PENSAMIENTOS LIMITANTES Todos tenemos un sistema de creencias y también un conjunto de pensamientos limitantes. Una creencia es básicamente un sentimiento de certeza acerca de algo. Una mera idea puede comenzar a volar si encontramos referencias y experiencias que la apoyen. La fuerza de una creencia depende de el nivel de intensidad emocional y del número de referencias que la sustenten. Podemos interpretar las referencias como queramos, y no importa realmente si una creencia es "verdad". Los seres humanos podemos racionalizar todo aquello en lo que escogemos creer. Lo más importante es saber que una creencia nos empodera. CONDICIONAMIENTO NEUROASOCIATIVO Cuando hacemos algo, nuestros cerebros crean una conexión neuronal asociada a un sentimiento o comportamiento. Cuando más lo hacemos, más se refuerza la conexión. Esa conexión es un patrón. Si detectamos que algunos de nuestros patrones "no son buenos" podemos buscar cambiarlos mediante el condicionamiento neuroasociativo, que es un sistema de 6 pasos para interrumpir patrones nocivos y sustituirlos por patrones positivos: 1) Define la meta 2) Motívate a alcanzarla 3) Interrumpe el patrón nocivo 4) Reemplázalo con el nuevo patrón 5) Condiciónate Comprueba el resultado Cambiar tu sistema de creencias es sólo el primer paso. Para mejorar realmente en la vida, tienes que cambiar tus estrategias.